Por: CAROL MALAVER | 9:52 p.m. | 23 de Noviembre del 2012 Extraído en su mayoría.
Los adultos mayores y mujeres embarazas son los que más peligro corren cuando caminan por los andenes introducidos en la administración de Enrique Peñalosa. Las grietas de los andenes se encharcan con la lluvia y se convierten en peligrosas trampas, la falla es debido al relleno fluido que Enrique Peñalosa introdujo con bastante desacierto en la capital. Detrimento patrimonial.
Las tabletas tambalean, se hunden y se inundan. Los usuarios se han caído en varias ocasiones.
Los andenes de la avenida 19 entre calles 134 y 161 parecen un rompecabezas a punto de desbaratarse. Lo que prometía ser una obra que mejoraría el espacio público del sector de Cedritos se ha convertido en una verdadera pesadilla. (Así lucen los 'nuevos' andenes ubicados en la avenida 19, entre calles 134 y 161)
Durante años, los habitantes esperaron ver embellecido el espacio peatonal de esta importante avenida -núcleo comercial del sector-, que fue proyectado con los dineros recaudados por el impuesto de valorización local. Hoy, tres años después de ser iniciada la intervención, la obra está en pésimas condiciones.
Solo falta dar un paseo por este corredor para darse cuenta de que los ciudadanos prefieren transitar por las zonas verdes a correr el riesgo de caerse por culpa de las tabletas que se tambalean.
"Uno camina por los andenes y de un momento a otro se hunde. He visto caer a varias personas. Pero, además, causa indignación haber pagado un impuesto de valorización tan caro para ver este tipo de acabados", dijo la residente Gladys Ballesteros.
Para esta obra, que estaba planeada para hacerse en 12 meses, se le asignaron 10.148 millones de pesos al contratista, Consorcio Calle 134. Esta sociedad la constituyeron las empresas Coopmunicipal (50 por ciento), Mauros Food Ltda. (20) -una firma dedicada a la elaboración de conservas alimenticias- y Coespro Ltda. (30) el 19 de agosto del año 2009.
Hoy no se sabe qué le va a pasar al contratista en mención por todas las irregularidades que se presentaron durante la ejecución de los trabajos y por lo que está pasando ahora después de finalizados.
"El IDU le informa a uno por qué se debe pagar valorización, pero nunca nos ha dicho cómo y cuándo le van a entregar a la comunidad la obra que esperaba. ¿Quién va asumir el arreglo y con qué dineros?", preguntó Inés, otra residente del sector.
Líderes políticos de la localidad de Usaquén también se han pronunciado al respecto. Según le dijo la edilesa Diana Olaya a Mi Zona, todo el año han denunciado está situación a las entidades correspondientes sin que alguna se haya pronunciado todavía.
"Creemos que las pérdidas por esta obra son grandes; debe de haber un detrimento patrimonial. No hemos sabido de avances en relación con la responsabilidad de los contratistas", dijo.
Varios vendedores del centro comercial Caobos, en la avenida 19 con calle 147, han sido testigos de los accidentes que estos andenes les han generado, sobre todo, a los adultos mayores.
"La otra vez vi que una señora de edad se cayó porque metió el pie en una tableta suelta. Es que no están fijadas. Es como si nunca las hubieran pegado", dijo Óscar, residente del barrio Capri.
De la obra también se ha quejado Mireya Esparsa, la administradora del centro comercial Caobos Calle 147, entrevistada por Mi Zona. "Los andenes se siguen deteriorando. Las personas mayores son las más perjudicadas y ahora todos, porque uno camina por allí y se tropieza. El malestar ya se siente en todo el sector", afirmó.
Lo último que informó el IDU fue que estaba realizando un análisis técnico de lo ocurrido con el contratista, pero nada que soluciona el problema. En eso lleva meses. "Creo que no soy el único ciudadano que está cansado de los robos y malversaciones de nuestro dinero en obras como esta", dijo Alfonso Jaramillo, al representar el sentir de la comunidad.
Hubo multas
El Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) informó que el Consorcio Calle 134 incumplió en lo referente a la implementación del diseño paisajístico, el cronograma, las obligaciones ambientales, los pagos de seguridad social de los subcontratistas y la terminación de obras.
También se demostró ausencia de personal y de equipos, deficiencia en calidad de prefabricados y hasta el incumplimiento del funcionamiento del punto Crea, en donde se le informan a la comunidad los pormenores de la obra. Por eso, la entidad hizo efectiva la cláusula penal por un valor de 1.720'216.417 pesos, que fueron girados por la aseguradora Royal & Sun Alliance al IDU el 20 de febrero del 2012.
Adicionalmente, declaró siniestro por la forma en que se manejó la inversión del anticipo del contrato y por eso hubo otra penalización por 2.137'251.295 pesos, también pagada por la aseguradora Royal & Sun Alliance al IDU el 2 de enero del 2012.
Lo que más preocupa a los residentes es que nadie les dice cuándo y cómo se va a arreglar el daño o se les devolverá la plata que se pagó por esa valorización local. Según la entidad, solo cuando las obras sean recibidas por ellos y por la interventoría y se cuente con la garantía de la póliza de estabilidad y calidad por una vigencia de cinco años se atenderán los daños.
Fuente: http://www.eltiempo.com/colombia/bogota/andenes-de-la-av-19-la-pesadilla-continua-_12398604-4
Los adultos mayores y mujeres embarazas son los que más peligro corren cuando caminan por los andenes introducidos en la administración de Enrique Peñalosa. Las grietas de los andenes se encharcan con la lluvia y se convierten en peligrosas trampas, la falla es debido al relleno fluido que Enrique Peñalosa introdujo con bastante desacierto en la capital. Detrimento patrimonial.
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| Los adultos mayores y mujeres embarazas son los que más peligro corren cuando caminan por los andenes introducidos en la administración de Enrique Peñalosa. Las grietas de los andenes se encharcan con la lluvia y se convierten en peligrosas trampas, la falla es debido al relleno fluido que Enrique Peñalosa introdujo con bastante desacierto en la capital. |
Las tabletas tambalean, se hunden y se inundan. Los usuarios se han caído en varias ocasiones.
Los andenes de la avenida 19 entre calles 134 y 161 parecen un rompecabezas a punto de desbaratarse. Lo que prometía ser una obra que mejoraría el espacio público del sector de Cedritos se ha convertido en una verdadera pesadilla. (Así lucen los 'nuevos' andenes ubicados en la avenida 19, entre calles 134 y 161)
Durante años, los habitantes esperaron ver embellecido el espacio peatonal de esta importante avenida -núcleo comercial del sector-, que fue proyectado con los dineros recaudados por el impuesto de valorización local. Hoy, tres años después de ser iniciada la intervención, la obra está en pésimas condiciones.
Solo falta dar un paseo por este corredor para darse cuenta de que los ciudadanos prefieren transitar por las zonas verdes a correr el riesgo de caerse por culpa de las tabletas que se tambalean.
"Uno camina por los andenes y de un momento a otro se hunde. He visto caer a varias personas. Pero, además, causa indignación haber pagado un impuesto de valorización tan caro para ver este tipo de acabados", dijo la residente Gladys Ballesteros.
Para esta obra, que estaba planeada para hacerse en 12 meses, se le asignaron 10.148 millones de pesos al contratista, Consorcio Calle 134. Esta sociedad la constituyeron las empresas Coopmunicipal (50 por ciento), Mauros Food Ltda. (20) -una firma dedicada a la elaboración de conservas alimenticias- y Coespro Ltda. (30) el 19 de agosto del año 2009.
Hoy no se sabe qué le va a pasar al contratista en mención por todas las irregularidades que se presentaron durante la ejecución de los trabajos y por lo que está pasando ahora después de finalizados.
"El IDU le informa a uno por qué se debe pagar valorización, pero nunca nos ha dicho cómo y cuándo le van a entregar a la comunidad la obra que esperaba. ¿Quién va asumir el arreglo y con qué dineros?", preguntó Inés, otra residente del sector.
Líderes políticos de la localidad de Usaquén también se han pronunciado al respecto. Según le dijo la edilesa Diana Olaya a Mi Zona, todo el año han denunciado está situación a las entidades correspondientes sin que alguna se haya pronunciado todavía.
"Creemos que las pérdidas por esta obra son grandes; debe de haber un detrimento patrimonial. No hemos sabido de avances en relación con la responsabilidad de los contratistas", dijo.
Varios vendedores del centro comercial Caobos, en la avenida 19 con calle 147, han sido testigos de los accidentes que estos andenes les han generado, sobre todo, a los adultos mayores.
"La otra vez vi que una señora de edad se cayó porque metió el pie en una tableta suelta. Es que no están fijadas. Es como si nunca las hubieran pegado", dijo Óscar, residente del barrio Capri.
De la obra también se ha quejado Mireya Esparsa, la administradora del centro comercial Caobos Calle 147, entrevistada por Mi Zona. "Los andenes se siguen deteriorando. Las personas mayores son las más perjudicadas y ahora todos, porque uno camina por allí y se tropieza. El malestar ya se siente en todo el sector", afirmó.
Lo último que informó el IDU fue que estaba realizando un análisis técnico de lo ocurrido con el contratista, pero nada que soluciona el problema. En eso lleva meses. "Creo que no soy el único ciudadano que está cansado de los robos y malversaciones de nuestro dinero en obras como esta", dijo Alfonso Jaramillo, al representar el sentir de la comunidad.
Hubo multas
El Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) informó que el Consorcio Calle 134 incumplió en lo referente a la implementación del diseño paisajístico, el cronograma, las obligaciones ambientales, los pagos de seguridad social de los subcontratistas y la terminación de obras.
También se demostró ausencia de personal y de equipos, deficiencia en calidad de prefabricados y hasta el incumplimiento del funcionamiento del punto Crea, en donde se le informan a la comunidad los pormenores de la obra. Por eso, la entidad hizo efectiva la cláusula penal por un valor de 1.720'216.417 pesos, que fueron girados por la aseguradora Royal & Sun Alliance al IDU el 20 de febrero del 2012.
Adicionalmente, declaró siniestro por la forma en que se manejó la inversión del anticipo del contrato y por eso hubo otra penalización por 2.137'251.295 pesos, también pagada por la aseguradora Royal & Sun Alliance al IDU el 2 de enero del 2012.
Lo que más preocupa a los residentes es que nadie les dice cuándo y cómo se va a arreglar el daño o se les devolverá la plata que se pagó por esa valorización local. Según la entidad, solo cuando las obras sean recibidas por ellos y por la interventoría y se cuente con la garantía de la póliza de estabilidad y calidad por una vigencia de cinco años se atenderán los daños.
Fuente: http://www.eltiempo.com/colombia/bogota/andenes-de-la-av-19-la-pesadilla-continua-_12398604-4
